Motor Clásico y Acrílicos

Navidad con ‘Motor Clásico y Acrílicos’, de Santiago Pedrós González

  • Reúne obras inspiradas en coches clásicos que destacan por su belleza, a través de luz, color y mirada artística y estará abierta hasta el próximo 18 de enero
  • La muestra ofrece un recorrido visual donde el automóvil se convierte en protagonista artístico, invitando a descubrir diseño y simbolismo
  • Se podrá visitar gratuitamente en Navidad, ofreciendo al público la oportunidad para disfrutar del arte del automóvil desde una perspectiva diferente 

El Museo de Historia de la Automoción de Salamanca (MHAS) inaugura la exposición ‘Motor Clásico y Acrílicos’, una muestra que reúne el arte creativo del artista Santiago Pedrós González (Talavera, 1988), licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca y apasionado del motor desde su infancia.

En esta exposición, el artista evita el hiperrealismo: su objetivo no es reproducir, sino interpretar. A través de un lenguaje pictórico propio, dota a cada vehículo de alma, resaltando la energía que desprenden sus volúmenes, contrastes y brillos. En sus composiciones, la materia pictórica cobra protagonismo y la pincelada mantiene la huella del gesto, como si el movimiento del motor se transformara en ritmo sobre el lienzo.

Motor Clásico y Acrílicos

Motor Clásico y Acrílicos

La motivación detrás de la exposición ‘Motor clásico y acrílicos’ nace de la profunda pasión del autor por los coches clásicos, un interés que lo acompaña desde la infancia. Sus primeras aproximaciones al mundo del motor surgieron a través de coches en miniatura y de las revistas de automóviles de su padre, cuyas imágenes de modelos de distintas épocas despertaron en él una fascinación que fue creciendo con los años. Más adelante, esta afición se intensificó mediante la lectura de libros especializados y, también, gracias a ciertos videojuegos que marcaron su adolescencia.

Motor Clásico y Acrílicos

El artista siempre ha sentido una especial atracción por la contemplación de los automóviles: sus líneas, sus proporciones y sus colores. Son precisamente estos detalles los que inspiran sus obras: la curva de un paso de rueda, la silueta de las ventanas, los brillos del cromado e incluso el entorno en el que el vehículo puede situarse en un momento determinado.

Motor Clásico y Acrílicos

En cada una de sus creaciones trata de capturar esa especie de “alma” que los coches pueden transmitir a quienes aman el mundo del motor. Por ello, cada cuadro implica un proceso de investigación previo en el que se determina tanto el modelo a representar como la composición idónea en función de sus formas, colores y detalles. Este proceso no solo sienta las bases de la obra, sino que además permite profundizar en la historia del modelo, sus diseñadores o sus motorizaciones, lo que ayuda a comprender mejor su esencia.

Motor Clásico y Acrílicos